BOSQUE MILENARIO

• Cuna de una milenaria cultura que sigue sorprendiendo al mundo
Pómac, el sueño de Naylamp

Guido Sánchez Santur
sasagui35@gmail.com

Hay un calor intenso que compite con esa refrescante corriente de aire que acaricia el rostro, de tanto en tanto. Así avanzamos en esta travesía que hemos emprendido, adentrándonos al corazón del Santuario Histórico de Bosque de Pómac, que alberga los algarrobos más representativos del norte peruano, en sus 5 mil 887 hectáreas.
La emoción nos embarga, no sólo por el aire puro que respiramos y la libertad que sentimos en medio de la naturaleza, sino también por el hecho de caminar sobre las huellas de la milenaria cultura Sicán que se asentó en este espacio y que aprovechó sosteniblemente el recurso vegetal.
Como mejor testimonio, en cada paso que damos nos topamos con los vestigios históricos que esa civilización dejó desperdigados en lo extenso del bosque. El director del Museo Nacional de Sicán, Carlos Elera, revela que aquí existen 30 monumentos arqueológicos, de los cuales sólo algunos están estudiados.
La Huaca El Loro se mantiene inamovible. Ahí se excavó más de una tonelada de objetos de plata y oro que adornaban la tumba de un personaje importante de la nobleza Sicán.
Más allá está la huaca Ventanas, en pleno proceso de investigación. Los arqueólogos ya avistaron algunas tumbas, las que se presume albergan otra cantidad significativa de valiosas piezas de la orfebrería Sicán. Los investigadores sostienen que en este ecosistema están los entierros más ricos en oro del país.
Cómo no enorgullecernos de nuestro pasado, si las civilizaciones que nos antecedieron nos dejaron una herencia cultural que sigue sorprendiendo al mundo, inclusive ese algarrobo que se aproxima a los 400 años, considerado el más viejo del bosque, de tronco retorcido y con sus gruesas ramas que descansan en el arenal. No hay turista que lo deje de visitar, lo observe con admiración y se lo lleve grabado en sus recuerdos y en la infaltable fotografía que se toma junto a él.
Bien ganado tiene el calificativo de “símbolo de los algarrobos del Perú”, y al que los lugareños le atribuyen virtudes mágico-religiosas. No es una coincidencia que junto a este árbol haya una gruta con una cruz de madera, a la que la comunidad rinde homenaje y se persigna cuando pasa por este camino.
La leyenda se complementa cuando llegamos a la casa de quien fuera Karl Weiss Schreiber, un ciudadano alemán que arribó a Lambayeque en 1912, quien se internó en el bosque y fue el pionero en aprovecharlo en la apicultura, introduciendo tecnología pionera en esta actividad, la misma que se continúa utilizando. Este personaje se ha convertido en una leyenda, pues gracias a su sabiduría y calidad humana, varios años fue director del centenario colegio nacional San José de Chiclayo y referente de muchas generaciones.
En este bosque hay más de 70 especies de aves, y algunas de ellas consideradas endémicas, como la Pava Aliblanca, la Cortarrama, el Chilalo (especie monógama, es decir que sólo tiene una hembra y cuando ésta muere se queda solo toda su vida). Esto es un atractivo especial para los turistas que gustan de la observación de aves.
Seis de las 20 comunidades por cuyas venas corre sangre sicán, son conscientes del inmenso valor histórico y natural de este legado, al que cuidan celosamente, pues saben que es un recurso económico en potencia. Algunas familias elaboran cerámica, preparan la nutritiva algarrobina con las vainas del algarrobo que cosechan durante el año o tienen sus granjas de apicultura de donde extraen miel de abeja de alta pureza. Estos productos son bastante preferidos por los turistas.
Esta cultura viva se evidencia más con la escenificación de los rituales ancestrales a cargo del grupo Pómac, que dirige Juan Parco Juárez, autor e intérprete de la cantata a Sicán, una obra teatral que ha recorrido el mundo y que los parlamentos incluyen frases en lengua muchik.
En esta caravana nos topamos con las 300 hectáreas de bosque invadidas por 90 familias desde 2001. Lo más preocupante es que en esta área hay 14 huacas que corren peligro de ser saqueadas. El caso está judicializado y los comuneros pidieron apoyo a la ministra de Comercio Exterior y Turismo, Mercedes Aráoz, quien en su reciente visita se comprometió a invocar al Poder Judicial que actúe con celeridad.
Este recorrido se inicia en el museo de Túcume, previa visita a las pirámides del mismo nombre. El trayecto es posible hacerlo caminando, en bicicleta montañera o a lomo de caballos peruanos de paso, lo cual constituye una experiencia especial. Con el sol encima, llegamos al caserío ecológico Pómac III, donde nos espera un reparador almuerzo a base de choclo, tamalitos o humitas, sangrecita, arroz con pato o cabrito. Y claro, no podemos obviar la tradicional chicha de jora.
Este es un paraje para un día de visita, ya sea en familia o entre amigos. Además de entrar en contacto con la naturaleza y conocer nuestra historia, nos vamos satisfechos y con las energías repuestas para iniciar una nueva jornada laboral. !El bosque de Pómac te espera, visítalo!.

MÁS DATOS
El Santuario Histórico Bosque de Pómac se ubica en el distrito de Pitipo, provincia de Ferreñafe (Lambayeque). El extremo sur se encuentra a 3.5 kilómetros al noreste de Pitipo, a 11.5 kilómetros de Ferreñafe y a 31.5 kilómetros de Chiclayo. Éste es uno de los dos únicos bosques secos ecuatoriales que existen en el mundo. Es uno de los cuatro únicos santuarios históricos del Perú.En 1984 se creó la Reserva Arqueológica y en 1991, la zona Reservada de Batán Grande. Entonces, eran más de 13 mil hectáreas de bosque. En 2001 fue categorizado como Santuario Histórico, con sólo 5 mil 887 hectáreas.

LA HORA DEL NORTE TURÍSTICO
“El Perú es más que Machu Picchu, éste debe ser un gancho para atraer a más turistas y mostrarles la diversidad de productos que tenemos en el norte del país”, con estas palabras, la ministra de Comercio Exterior y Turismo (Micentur), Mercedes Araoz, lanzó en Chiclayo, la campaña “El Perú te espera…conócelo”.
Esta promoción pretende que los limeños viajen al interior del país aprovechando los precios especiales que ofrecen la aerolínea LAN Perú, la Asociación Peruana de Operadores de Turismo Receptivo e Interno (Apotur) y los establecimientos de hospedaje en convenio con Promperú.
El costo de estos paquetes no supera los 700 soles y comprende dos noches y tres días a 10 destinos del país, entre los que figura Trujillo y Lambayeque, donde se ofrecen playas, exquisita gastronomía, arqueología, museos, culturas vivas y naturaleza.
A través de spots televisivos se destacan los principales atractivos de cada región, a fin de que los viajeros opten por estos destinos los fines de semana largo, de manera especial.