EL EMBRUJO DE LOS MOCHES

El Brujo abrió sus puertas

Pepe Hidalgo Jiménez

En el mundo existen brujos y brujos. Los primeros son aquellos a quienes el argot criollo bautiza como personajes malévolos y que preparan pócimas para alucinar, mientras que los otros todavía no se han mostrado por completo, quizás porque sus secretos y encantos superan cualquier alucinación de brebaje.
El Brujo que existe en Magdalena de Cao, distrito ubicado a 45 minutos de Trujillo, pertenece a este último grupo. Pero, ¿qué es realmente? Un complejo arqueológico, un centro ceremonial o una maravilla cultural que durante miles de años escondió sus plataformas superpuestas, sus tumbas, un registro iconográfico interesante y, lo que ha sorprendido a todos, una momia que ha sido bautizada como La Señora de Cao.
En realidad, El Brujo es todo esto y mucho más. Si bien por el momento los turistas no podrán deleitarse con todas las sorpresas que escondió este complejo arqueológico durante años –para garantizar el cuidado de algunos trabajos- lo que allí reposa sorprende por el perfecto estado de conservación y claridad en que se encuentra.
Ayer, al promediar la una de la tarde, autoridades del Instituto Nacional de Cultural del Perú, representadas por el director Luis Guillermo Lumbreras y de la Fundación Wiese –que financió los trabajos de investigación y conservación- pusieron en valor este centro ceremonial, con la esperanza de que los visitantes inicien el recorrido de un nuevo circuito turístico en el norte del país.
El acto tuvo como momento colorido la presentación teatral de una escena de sacrificio en honor a la Señora de Cao. La puesta en escena estuvo dirigida por el actor Marco Ledesma. Antes de este acto, el grupo Máscara de Barro, que dirige Sonia Rodríguez, presentó un acto similar, propio de la vida Mochica.
AL BRUJO ME FUI
Magdalena es un distrito que convive con la tranquilidad y el silencio. Por eso, cuando cualquier vehículo con gente extraña ingresa a sus solitarias calles, los pobladores te miran como bicho raro, pero no por eso evitan expresarte su hospitalidad.
Ayer, Magdalena fue invadida por decenas de bichos raros. Todos acudían a la puesta en valor del Brujo, pero a los pobladores la noticia no les dibujó en su rostro una alegría, pues en más de una oportunidad los circuitos turísticos que han movilizado visitantes al lugar no se han tomado la molestia de hacer un alto en el Plaza principal, donde decenas de habitantes ofrecen artesanía u otro objeto de arte que confeccionan.
Lo curioso de este negocio es que muchos de estos comerciantes al paso fueron alguna vez huaqueros y ahora deciden apostar por la cultura, vendiendo lo que mejor saben hacer.
En las afueras del complejo arqueológico la realidad es la misma. Es más, la vía que conecta al distrito de Magdalena con el complejo no está en buenas condiciones, pero se espera que el Gobierno Central, a través del Ministerio de Transportes, cumpla el sueño de construir la carretera esperada.
MARAVILLAS Y MARAVILLAS
En la ceremonia central, Régulo Franco Jordán, director del proyecto arqueológico El Brujo, reconoció el esfuerzo que la Fundación Wiese desplegó para sacar adelante este proyecto, cuyos trabajos de investigación duraron aproximadamente 16 años.
Franco citó las maravillas iconográficas que tiene el complejo arqueológico, pero aclaró que aún resta mucho por investigar, pues consideró que en este lugar hay mucho por ver, desde distintos aspectos.
En su turno, el director del Instituto Nacional de Cultura, Guillermo Lumbreras, también reconoció el apoyo de la Fundación Wiese, pero además destacó la alianza estratégica que sostuvo con la institución que dirige, la cual permitió iniciar la puesta en valor.
Finalmente, la directora del Instituto Regional de Cultura de La Libertad, Lutgarda Reyes Álvarez, reconoció el esfuerzo que cumplieron los arqueólogos del INC y de la Fundación Wiese para poner en funcionamiento este importante centro.
LA SEÑORA DE CAO
Las personas que acudieron a la ceremonia de puesta en valor del Brujo deseaban ver lo que meses atrás difundió La Industria en calidad de primicia: la existencia de una momia –bautizada como la Señora de Cao- que fue hallada al interior de un mausoleo completamente decorado con elementos figurativos que forman parte del mundo mágico religioso de los mochicas.
Al respecto, el director nacional del INC confirmó la primicia, pero aclaró que la momia –con todos sus telares e implementos- será mostrada al público cuando existan las condiciones necesarias que este tipo de hallazgos requieren.
Lumbreras no adelantó fecha sobre dicha presentación, pues aclaró que existe el proyecto de construir un museo de sitio en el complejo arqueológico, donde además se espera exhibir la osamenta y ceramios hallados durante el proceso de excavación.
Fue el director del complejo arqueológico El Brujo quien se encargó de detallar que la Señora de Cao habría fallecido aproximadamente a los 25 años de edad. Asimismo, confirmó que su cuerpo está tatuado con serpientes y arañas. Este insecto formó parte de las actividades chamánicas de la zona.
“Desde ya podemos afirmar que era una experta tejedora, puesto que hemos encontrado agujas de oro y telares. También hay coronas y hermosos collares en oro. Se halló además hermosos adornos que seguramente ella usaba cuando presidía cualquier ceremonia especial”, afirmó Franco.
El director agregó además que las investigaciones en la parte superior de la pirámide de El Brujo todavía no concluyen. Por ahora, los turistas sólo recorrerán la fachada principal de la huaca, pero se espera que en la brevedad posible el embrujo de los mochicas se presente en su totalidad.
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Debe saber que… El Brujo posee iconografía relacionada con escenas de guerreros y prisioneros. También se aprecian oficiantes y figuras sobrenaturales como el Decapitador. Su policromía está compuesta por el rojo, amarillo, marrón, blanco y gris. La pirámide tiene una antigüedad de mil 700 años. En los trabajos de excavación y conservación se han invertido hasta el momento más de 2 millones de dólares.
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Tome en cuenta… Ingresar al Brujo costará 11 soles para los adultos, 5 soles estudiantes y universitarios, mientras que los niños sólo pagarán un nuevo sol.
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