Gallito Ciego, donde
el calor abriga el alma
Guido Sánchez Santur
sasagui35@gmail.com
Cuando uno va rumbo a Cajamarca y viaja de día, no puede resistirse a soltar una expresión de alivió y sorpresa al momento de cruzar el valle Jequetepeque, donde se extienden los cultivos de arroz con plantaciones verdosas o amarillentas, dependiendo de la etapa de maduración, o los frutales a los costados de la carretera, tras pasar el desvío de Ciudad de Dios.
La impresión llega a su clímax cuando volteamos la mirada a la derecha y nos topamos con un espejo de agua, entre los escarpados cerros de Yonán, a 15 minutos de Tembladera, un distrito de la provincia Contumazá que pertenece a Cajamarca.
Esa sensación de grandeza e ingenio humano se acrecienta cuando estamos en el mismo lugar, al caminar por la orilla de la represa construida en 1973 por el Proyecto Especial Jequetepeque Zaña (Pejeza), desde donde discurre el agua para regar las chacras de Pacasmayo, San Pedro de Lloc, Chepén y Zaña, éste último en la región Lambayeque.
¿Y dónde radica su atractivo? Esta obra de ingeniería hidráulica, al igual que Chavimochic, generó un microclima especial, al influjo del agua en abundancia, la vegetación permanente y el calor reinante casi todo el año. El sol radiante que aparece desde el amanecer le imprime a este paraje características de un clima tropical, que nos despereza a quienes hemos dejado atrás la friolenta ciudad de Trujillo, que ya tiene poco de primaveral.
Este ambiente motivo a los directivos del Proyecto a acondicionar el Complejo Turístico Gallito Ciego que atrae a cientos de visitantes a lo largo del año, pero con mayor incidencia en fechas especiales, como feriados largos (Semana Santa, Fiestas Patrias, Años Nuevo).
El director ejecutivo de Pejeza, Edilberto Ñique Alarcón, orgulloso nos comenta que durante la pasada Semana Santa la presencia de turistas rebasó las expectativas, pues pese a contar con solo 70 habitaciones aquí se quedaron más de 200 personas. ¿Dónde durmieron?, aprovechando la tranquilidad de la zona muchos acamparon entre el bosque o en las explanadas.
En la represa es factible la práctica de deportes acuáticos o paseos en bote, pero el mismo hecho de observar la infraestructura de cemento que unió dos cerros ya es bastante.
El espectáculo grandioso se presenta en los instantes que los técnicos abren las válvulas (con una capacidad de 70 metros cúbicos por segundo de evacuación) por donde sale a gran fuerza el agua represada.
El visitante tiene la posibilidad de alojarse en los confortables bungalows o casas ejecutivas, conforme sea su predilección. Con el pago del alojamiento se tiene derecho a utilizar el comedor, la piscina de adultos y de niños, juegos infantiles, los campos de fulbito y el casino.
Pero lo más impactante es cuando los mismos ingenieros del Proyecto nos invitan a un recorrido por las instalaciones de la represa, la central hidroeléctrica y los laboratorios de control biológico y de reproducción de especies vegetales diversas.
Me quedé maravillado al momento que Rubino Mejía Anaya, jefe de la División de Transferencia de Tecnología y Responsable del Laboratorio de Biotecnología, me explicaba paso a paso el proceso de producción de los plantones de diversas especies.
Mejía Anaya no oculta su emoción mientras nos comenta que él fue quien produjo in vitro en este laboratorio la semilla libre de enfermedades para la renovación de los campos de caña de azúcar la empresa agroindustrial Cartavio con 15 mil plantones.
Pero su pecho se hincha de orgullo al explicarnos que en los campos experimentales de Gallito Ciego se cultivan diversas especies ornamentales calidad de exportación. Las más llamativas son las flores y claveles que duran hasta tres meses sin agua. Estas son muy difíciles de encontrar en los mercados nacionales porque con las técnicas tradicionales su reproducción es demasiado lenta y costosa, y su hábitat generalmente se ubica sobre los 2300 metros sobre el nivel del mar, en el Callejón de Huaylas.
Entre las especies más sorprendente están los crisantemos (ojo de toro, abejita) o lirios, de colores cargados, pero sencillas.
Asimismo, encontramos especies frutícolas exóticas como la Pitajaya (cactus) o el Sacha Inchi, famoso por poseer un aceite que contiene el omega, una sustancia antioxidante que se come como el maní tostado. Además están las diversas variedades de piña, fresa, chirimoya, entre otras.
Más allá está un bosque en el que se puede caminar libremente, aspirando el aire puro y observado las aves que anidan en este hábitat.
Un fin de semana en este escenario es reparador, alejado totalmente del ruido y la contaminación de la ciudad, durmiendo en medio de la naturaleza. Al amanecer nos despertamos arrullados por los pajarillos que se asoman a las ventanas como si quisieran darnos al bienvenida.
el calor abriga el alma
Guido Sánchez Santur
sasagui35@gmail.com
Cuando uno va rumbo a Cajamarca y viaja de día, no puede resistirse a soltar una expresión de alivió y sorpresa al momento de cruzar el valle Jequetepeque, donde se extienden los cultivos de arroz con plantaciones verdosas o amarillentas, dependiendo de la etapa de maduración, o los frutales a los costados de la carretera, tras pasar el desvío de Ciudad de Dios.
La impresión llega a su clímax cuando volteamos la mirada a la derecha y nos topamos con un espejo de agua, entre los escarpados cerros de Yonán, a 15 minutos de Tembladera, un distrito de la provincia Contumazá que pertenece a Cajamarca.
Esa sensación de grandeza e ingenio humano se acrecienta cuando estamos en el mismo lugar, al caminar por la orilla de la represa construida en 1973 por el Proyecto Especial Jequetepeque Zaña (Pejeza), desde donde discurre el agua para regar las chacras de Pacasmayo, San Pedro de Lloc, Chepén y Zaña, éste último en la región Lambayeque.
¿Y dónde radica su atractivo? Esta obra de ingeniería hidráulica, al igual que Chavimochic, generó un microclima especial, al influjo del agua en abundancia, la vegetación permanente y el calor reinante casi todo el año. El sol radiante que aparece desde el amanecer le imprime a este paraje características de un clima tropical, que nos despereza a quienes hemos dejado atrás la friolenta ciudad de Trujillo, que ya tiene poco de primaveral.
Este ambiente motivo a los directivos del Proyecto a acondicionar el Complejo Turístico Gallito Ciego que atrae a cientos de visitantes a lo largo del año, pero con mayor incidencia en fechas especiales, como feriados largos (Semana Santa, Fiestas Patrias, Años Nuevo).
El director ejecutivo de Pejeza, Edilberto Ñique Alarcón, orgulloso nos comenta que durante la pasada Semana Santa la presencia de turistas rebasó las expectativas, pues pese a contar con solo 70 habitaciones aquí se quedaron más de 200 personas. ¿Dónde durmieron?, aprovechando la tranquilidad de la zona muchos acamparon entre el bosque o en las explanadas.
En la represa es factible la práctica de deportes acuáticos o paseos en bote, pero el mismo hecho de observar la infraestructura de cemento que unió dos cerros ya es bastante.
El espectáculo grandioso se presenta en los instantes que los técnicos abren las válvulas (con una capacidad de 70 metros cúbicos por segundo de evacuación) por donde sale a gran fuerza el agua represada.
El visitante tiene la posibilidad de alojarse en los confortables bungalows o casas ejecutivas, conforme sea su predilección. Con el pago del alojamiento se tiene derecho a utilizar el comedor, la piscina de adultos y de niños, juegos infantiles, los campos de fulbito y el casino.
Pero lo más impactante es cuando los mismos ingenieros del Proyecto nos invitan a un recorrido por las instalaciones de la represa, la central hidroeléctrica y los laboratorios de control biológico y de reproducción de especies vegetales diversas.
Me quedé maravillado al momento que Rubino Mejía Anaya, jefe de la División de Transferencia de Tecnología y Responsable del Laboratorio de Biotecnología, me explicaba paso a paso el proceso de producción de los plantones de diversas especies.
Mejía Anaya no oculta su emoción mientras nos comenta que él fue quien produjo in vitro en este laboratorio la semilla libre de enfermedades para la renovación de los campos de caña de azúcar la empresa agroindustrial Cartavio con 15 mil plantones.
Pero su pecho se hincha de orgullo al explicarnos que en los campos experimentales de Gallito Ciego se cultivan diversas especies ornamentales calidad de exportación. Las más llamativas son las flores y claveles que duran hasta tres meses sin agua. Estas son muy difíciles de encontrar en los mercados nacionales porque con las técnicas tradicionales su reproducción es demasiado lenta y costosa, y su hábitat generalmente se ubica sobre los 2300 metros sobre el nivel del mar, en el Callejón de Huaylas.
Entre las especies más sorprendente están los crisantemos (ojo de toro, abejita) o lirios, de colores cargados, pero sencillas.
Asimismo, encontramos especies frutícolas exóticas como la Pitajaya (cactus) o el Sacha Inchi, famoso por poseer un aceite que contiene el omega, una sustancia antioxidante que se come como el maní tostado. Además están las diversas variedades de piña, fresa, chirimoya, entre otras.
Más allá está un bosque en el que se puede caminar libremente, aspirando el aire puro y observado las aves que anidan en este hábitat.
Un fin de semana en este escenario es reparador, alejado totalmente del ruido y la contaminación de la ciudad, durmiendo en medio de la naturaleza. Al amanecer nos despertamos arrullados por los pajarillos que se asoman a las ventanas como si quisieran darnos al bienvenida.
INFORMES
Para los interesados en visitar Gallito Ciego existe la Oficina de Promoción de la Inversión Privada (Opip) que tiene una dependencia de turismo en la que se pueden hacer reservaciones. Los teléfonos son: 076-837004 / 837005. También es posible contactarse con la Oficina de Relaciones Públicas.
Gallito Ciego está a 155 kilómetros de Trujillo, tramo que se cubre en 2:30 horas, si se tiene movilidad particular. En caso contrario es posible abordar un bus que cubre la ruta Trujillo-Chiclayo (8 soles) y bajarse en la localidad Ciudad de Dios, donde se aborda un taxi colectivo que en 40 minutos y por cuatro soles nos lleva hasta el complejo turístico.
Los bungalows tienen tres camas, agua fría y caliente, sistema de televisión abierta con cuatro canales. En el comedor hay un televisor con servicio de DirecTV. Las habitaciones ejecutivas comprenden una sala de estar, sala-comedor, cocina, refrigeradora, closet en los dormitorios, tres cuartos (con cinco camas de plaza y media, y una matrimonial de dos plazas y media), dos baños.
¿GALLITO CIEGO?
La denominación de Gallito Ciego que adquiere este complejo turístico se debe a que dentro del mismo existe una pintura rupestre en la que aparece la figura de un gallo erguido. Como esta imagen se han encontrado otras muestras de este arte que plasmaron las antiguas civilizaciones que poblaron esta zona, quienes la escogieron sus características climáticas, pero sobretodo por la calidad de sus tierras que permitían el cultivo de diversas especies.
Para los interesados en visitar Gallito Ciego existe la Oficina de Promoción de la Inversión Privada (Opip) que tiene una dependencia de turismo en la que se pueden hacer reservaciones. Los teléfonos son: 076-837004 / 837005. También es posible contactarse con la Oficina de Relaciones Públicas.
Gallito Ciego está a 155 kilómetros de Trujillo, tramo que se cubre en 2:30 horas, si se tiene movilidad particular. En caso contrario es posible abordar un bus que cubre la ruta Trujillo-Chiclayo (8 soles) y bajarse en la localidad Ciudad de Dios, donde se aborda un taxi colectivo que en 40 minutos y por cuatro soles nos lleva hasta el complejo turístico.
Los bungalows tienen tres camas, agua fría y caliente, sistema de televisión abierta con cuatro canales. En el comedor hay un televisor con servicio de DirecTV. Las habitaciones ejecutivas comprenden una sala de estar, sala-comedor, cocina, refrigeradora, closet en los dormitorios, tres cuartos (con cinco camas de plaza y media, y una matrimonial de dos plazas y media), dos baños.
¿GALLITO CIEGO?
La denominación de Gallito Ciego que adquiere este complejo turístico se debe a que dentro del mismo existe una pintura rupestre en la que aparece la figura de un gallo erguido. Como esta imagen se han encontrado otras muestras de este arte que plasmaron las antiguas civilizaciones que poblaron esta zona, quienes la escogieron sus características climáticas, pero sobretodo por la calidad de sus tierras que permitían el cultivo de diversas especies.
1 comentarios:
Estimado Guido, muy agradecido por la información de Gallito ciego... soy un ingeniero civil peruano que en estos momentos vivo en Londres. Cuando me encontraba estudiando en la Universidad Nacional de Ingeniería en Lima conocí del proyecto Jequetepeque-Zaña, años después supe que comenzó a trabajar la represa de gallito ciego; que ademas de significar un importante componente del sistema de irrigación Chavimochic iba a crear un polo de desarrollo turístico alrededor.
Muchas gracias por actualizarme con la información al particular.
Saludos,
Víctor Rojas (pool.rojas@googlemail.com
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